Estudio Blurlogroño
Nos encontramos con un espacio inerte, poco iluminado y ventilado. Nuestra primera intención fue la de crear unas entrada de luz natural para iluminar todo el espacio. Esto se consiguió a través de una serie de aperturas generosas pero controladas en la cubierta.
Por otro lado, quisimos mantener, recuperar y realzar una cubierta de madera del S. XIX que poseía una calidez adecuada para la actividad que se iba a desarrollar.
Para que cada elemento de este espacio tuviera su propia identidad, diferenciar claramente lo existente de lo nuevo, los materiales utilizados debían ser totalmente opuestos.
El hierro, como segundo material protagonista, conformará y se adueñará de todo el espacio mediante unas estanterias. Estanterías lineales que recorren todo el estudio, tanto en planta baja como en planta altillo. A su vez, el mismo material sirvió para conformar las escaleras, mesas de trabajo y puertas de los armarios.
Para finalizar, un vidrio transparente como tabique de división y un pavimento continúo gris acabarán de contrastar con la cubierta inclinada y unificar toda la intervención.