Casa Gruller

Casa Gruller

Nos encontramos con un emplazamiento singular, una parcela ubicada, literalmente, en medio de una de las calles de salida del pueblo. Parcela que establece una relación mínima con las edificaciones existentes al encontrarse aislada y pegada a la escarpada ladera de una montaña.

La primera intención fue la de crear un elemento singular, descontextualizado, independiente. Como una piedra que se desprende de la montaña y se queda en medio del camino. Un volumen con unas fachadas facetadas con caras no paralelas entre sí.

Una pendiente muy pronunciada en el terreno hará plantear el programa en diferentes niveles. Niveles que buscarán relaciones visuales con su entorno a la vez que articulan el programa de lo más público a lo más privado.

Un espacio central, como si de una grieta en una piedra se tratara, servirá para ubicar la escalera que comunica todos los niveles.

Un único material exterior, formará la piel del edificio, tanto en fachada como en cubierta, dotándolo de una sensación monolítica y de uniformidad.

Perforaciones circulares en las contraventanas a diferentes alturas y diferentes diámetros harán perder la escala real del edificio.